¿Cuántas veces escuchas eso al cabo del día?

Y no es que te importe un bledo, pero lo asumes como un mal necesario para lograr esas pocas ofertas que te aceptan.

-¿Es eso del 80% contra el 20%?

-¡Ojalá!, pero no creo porque la proporción de NO es superior a esa ratio. Eso seguro.

-¿Acaso es el cabrón del Murphy ese?

-¿Son gajes del oficio?

-¿Se trata de la Ley de la Probabilidad?

-¿Somos muy malos vendiendo?

Puede que haya de todo un poco.

Y no podemos actuar sobre las leyes de la metafísica que exceden de nuestro control.

Así que hay que centrarse en lo único que SÍ tenemos la sartén por el mango.

Mejorar las técnicas que usamos para vender.

(Vender, lograr, persuadir, disuadir, convencer, alcanzar, ligar)

Mira esto, cuando te dicen:

NO NOS INTERESA

¡Cómo si fueran un equipo de no interesados!

(Este que responde así es el mismo que habla de sus abogados. Es que me parto)

Pero con el disgusto que sientes por la frustración que nos provocan los fanfarrones, se hacen las gaditanas tirabuzones.

Y no te quedes con la negativa, porque sabes que lo que le ofreciste es bueno y funciona.

Así que te toca revisar todo el proceso y analizar lo sucedido paso por paso. Porque seguro que hay alguna manera para el contragolpe.

-No nos interesa.

-Eso es lo que se dice una respuesta directa, -yo he comenzado por responder esto.

Y hay otra cosa más que también está en tu mano:

“Incrementa el número de contactos a quienes presentarles tu magnífica propuesta”

La Ley de la Probabilidad te sonreirá.

1.Venderás más. Seguro.

2.Aumentará la sensación de que estás haciendo todo posible.

Y notarás los beneficios de sentirte muy muy bien.