Te interesa saber a qué hora puedes llamar a tu cliente y clavarla.

Es fundamental.

Cuando lo que quieres es venderle algo, cobrarle, solucionar un problema o que te haga un favor, la hora idónea para llamarlo es fundamental.

También si quieres llamar a alguien que te gusta. Es el mismo patrón.

Vender

Pedir

Convencer

Ligar

Conseguir

Persuadir

Todo se mueve por los mismos hilos y es fundamental que controles perfectamente a qué hora tienes que mover cada uno de ellos.

Cuando mi hijo era pequeño me dijo un día:

-Papá, me he dado cuenta de que si te pido algo cuando estás ahí dentro, me dices que no.

(Ahí dentro está mi mesa de trabajo, donde estoy escribiendo esto. Aislado, en trance, je, je…)

-Pero cuando me espero y te lo pido aquí, siempre me dices que sí.

(Aquí es en un sillón orejero que tengo ahí afuera, donde caigo cuando salgo del trance)

Pues ya sabes cual es la lección, hijo mío de mi alma. Y el chavalote se aplica el cuento conmigo, y también con los demás:

-Con su tutor para el TFG.

-Con la gente del despacho de las prácticas esas sin cobrar un chavo.

-Con la cita de la peluquera.

-Menos con su madre. Y debería, lo mismo que con todo.

También tú.

Porque eres especial y un máquina en lo tuyo, pero no puedes pasar por alto que resulta fundamental elegir la mejor hora para cada gestión.

Para que vendas más y las cosas te vayan mejor de lo que te van.

Para ligar de vez en cuando.

Para poner la pica.

Soy bueno en esto y te lo puedo contar detalladamente si reservas aquí una formación presencial que te cambiará la vida.

Si prefieres seguir igual es mejor que no hagas cambios.