El menda de la tarjeta colgando
Mira que es curioso lo que pasa en la Universidad.
Y no se me ocurre hablar mal de ese sitio en el que de vez en cuando me invitan para que cuente alguna Dreamstoria.
No se me ocurre hablar mal pero claro que se me ocurre contar lo que pasa.
Por supuesto.
Porque es tremendo lo poco preparatoria que la Universidad es para la vida real.
El grupúsculo de mendas que enseñan y enseñan lo mismo que vienen enseñando desde tiempo inmemorial, viven fuera del mundo real.
Mejor dicho.
Sus enseñanzas sólo sirven para quienes pretenden seguir esos mismos pasos:
1.Graduarse.
2.Masterarse.
3.Doctorarse.
4.Adocenarse para la siguiente generación.
Y da lo mismo estudies lo que estudies:
Ingeniería
Historia
Empresariales
Filosofía
Derecho
Marketing
Yloquesea… da lo mismo que lo mismo da.
Estos son los mendas que asisten a congresos inoperantes y, horas después de la clausura, todavía llevan colgando del cuello el cartelito ese con el que se acreditan como inútiles.
Inútiles destinados a dar clase, inútiles directos a sufrir y a hacer sufrir en las empresas.
Sin embargo
Pero
Algunas veces
podría darse el caso de que durante la etapa estudiantil universitaria te encuentres con algún profesor de esos que además de dar clase, conocen los entresijos del trabajo fuera de los campus.
Estos son los que saben.
Los que saben latín y saben vender, que es lo que tú necesitas saber para ganarte la vida.
Y da lo mismo lo que hayas estudiado.
Lo que te interesa aprender es a vender cualquier cosa a cualquier persona.
Tendrás dinero.
Podrías empezar por aquí. ¿30€ es muy barato?
O también asistir a una de mis clases en la Universidad.
Pero si quieres una formación que cambiará cosas, para todo tu equipo, puedes reservar la fecha que mejor se te adapte.
No es barato.
Te interesa.