Aquí huele a mierda

Si entras en una habitación que huele a mierda y te quedas un tiempo en ella, al poco tiempo dejarás de olerla.

Te has acostumbrado al olor. Por eso ya no hueles.

Por eso tienes que cuestionarte tu entorno. Todo el tiempo. Es imprescindible.

Porque si permaneces en un mal entorno, este te destruirá.

Y esto no es algo dirigido exclusivamente a las ventas. Es que ni siquiera lo pienso.

¿Esa relación de pareja de verdad va para alguna parte? No sientas miedo por sacar las conclusiones que toquen.

¿Ese trabajo horrible en qué coño te está convirtiendo? Más vale que seas tú el que te lo digas a ti mismo antes de que lo hagan otros.

¿Ese grupo de amigos qué te aporta? Analízalo bien, es muy importante esta parte del entorno.

¿Y la familia? ¿Qué hacemos con la familia? O resuelves esto o estás perdido.

Ahora viene uno y dice:

Paco, me parece increíble que te tomes todo este tiempo en hablar del mal olor de la mierda.

La otra:

Estos coaches se creen que han descubierto la pólvora.

Y lo tremendo es que esta Dreamstoria sale de que el otro día fui a una tienda de pinturas a comprar un bote de pintura para pintar la habitación de mi hija.

Al entrar dije:

-Aquí huele a pintura.

-Pues yo no huelo, me he acostumbrado, -me respondió la vendedora con aire de resignación.

Mira que ocurrírseme lo de la mierda a partir de las pinturas. Hay que ver como sois los coaches. (Qué horror de palabra)

Tú puedes decirme lo que quieras. Me viene de cine.

Puedes opinar aquí.

Y cuidado no te vayas a comprar mi libro sin querer.

Sueña sin perder de vista tus lentejas. Es este.

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